lunes, 4 de enero de 2010

Mi Vida... Un Propósito.


Tarde o temprano, toda persona se pregunta que propósito tiene la vida.
¿Será acaso trabajar duro para mejorar nuestras condiciones de vida, proveer lo necesario par nuestras familias, morir a los 70 u 80 años y luego dejar de existir para siempre.
Un Joven que pensaba así dijo que el propósito de la vida es:
“Vivir, tener hijo, ser feliz y entonces morir”
Pero ¿Es verdad que la muerte le pone fin a todo?

En los países orientales como occidentales, creen que la razón principal de nuestra existencia es adquirir riquezas materiales.
Creen que con estas se puede vivir una feliz y con propósito. Pero sin embargo una cantidad sorprendente de gente adinerada insiste en que no es feliz.

JIMMY CARTER expresidente estadounidense, dijo:
“hemos descubierto que el poseer cosas y el consumir cosas no satisface nuestro anhelo de significado.
La acumulación de bienes materiales no puede llenar el vacío de vidas que carecen de confianza o propósito.”

Otro líder político dijo:
“Ya llevo varios años enfrascado en una búsqueda intensa de verdades en cuanto a mi mismo y mi vida; como nunca antes la gente se pregunta: ¿Quiénes somos?, ¿Con que propósito estamos aquí?

Amenos que demos por hecho la existencia de Dios, la búsqueda del propósito de vivir no tiene sentido.
A menos que creamos que Dios es real, verdadero, lo tengamos en nuestro interior, en nuestra familia, lo hayamos aceptado como nuestro ayudador, nuestro salvador personal.

La búsqueda del propósito de vivir ha intrigado a la gente por miles de años y lo sigue haciendo.
Eso ocurre por que solemos empezar por el punto de partida errado: Nosotros mismos,
Nos hacemos preguntas egoístas como:
¿Qué quiero ser?, ¿Qué debo hacer con mi vida?, ¿Cuáles son mis metas, mis anhelos, mis sueños con el futuro?

Enfocarnos en nosotros mismos nunca podrá revelarnos el propósito de nuestra vida.
La Biblia dice: En su mano esta la vida de todo ser viviente.

Dios es nuestro punto de partida. Fuimos creados por Dios y para Dios, Y hasta que lo entendamos, nuestra vida no tendrá ningún sentido.
Sólo en Dios encontramos nuestro origen, nuestra identidad, nuestro sentido, nuestro propósito, nuestro significado y nuestro destino.
Cualquier otra ruta nos conducirá a un callejón sin salida.

El propósito de nuestra vida es mucho mas grande que nuestra carrera, familia, nuestro sueños mas vehementes.

Y si no hemos entendido aún, que es Dios el único que puede diriguir nuestras vidas Nuestra búsqueda de propósito de vivir, no tendrá sentido.

Cambiemos la forma de ver nuestro proposito, no enfoquemos el proposito en nosotros, sino en El.

Aun es tiempo de cambiar,
No te enfoques en el resultado, enfócate primero en los cambios que debes realizar para lograr tus resultados.

Dios te Bendiga.